domingo, 17 de abril de 2011

Confianza en Dios pese a la violencia indiscriminada

He escuchado muchas veces que el mundo en el que vivimos – la sociedad, la comunidad, la política, la educación… – está corrupto y lleno de violencia de muchos y muy diferentes tipos. En los últimos años hemos visto en México – y en mi caso particular, en Nuevo León – una escalada, un incremento de la violencia en la sociedad. Hace cinco años era noticia que hubiera algún ejecutado, secuestrado o un tiroteo en alguna parte del estado; ahora ya aburre ver tanta violencia, nos hastía, ya nos hemos acostumbrado a tenerla presente, a la vuelta de la esquina, frente a nuestras casas, en el patio de la escuela de nuestros hijos… En todas partes hay violencia, violencia y corrupción.